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Alianza Lima 3 - Melgar 2

¿Cómo se evitó otro amargo final? Alianza parecía repetir la historia tantas veces vista durante este año, dejando ir un triunfo que debía quedar en el bolsillo. Sin embargo, tras el empate de Melgar, la construcción de la victoria y el feliz desenlace tuvieron mucho que ver con el atrevimiento de dos juveniles: Mauricio Matzuda (19) y José Gallardo (18), quienes supieron aparecer bien en medio de la tensión y poner la frescura justa para inclinar la balanza a nuestro favor.

Mauricio Marzuda y el grito de gol en su debut.

Escribe: El Mago del Arco (Twitter: @elmagodelarco)

Así alinearon:

Víctor Reyes mandó un ofensivo 4-2-3-1. Mientras Wilder Cartagena y Rinaldo Cruzado se encargaron de la contención, el ataque tuvo mayor volumen con Kevin Quevedo por derecha, Joazhiño Arroé como enganche y el debutante Mauricio Matzuda por izquierda. Affonso fue el único hombre en punta.

Jorge Pautasso, por su parte, paró un 4-3-1-2 más conservador. Romero, Leudo y Shonn Sánchez se pararon en la primera línea de volantes, mientras que el ataque consistió en las elaboraciones de Joel Sánchez y Dahwling Leudo para los delanteros Jhonny Vidales y Bernardo Cuesta.

Primer tiempo: 

Tras un trámite dinámico en un inicio, y muy táctico después, Alianza marcó cierta superioridad en el terreno de juego ante un Melgar replegado y de pocas transiciones efectivas. Más allá de las conocidas aperturas por las bandas, Alianza mostró más atrevimiento por el medio a través de Arroé y Matzuda, quienes ganaron varias faltas y provocaron la amonestación de la zaga completa del rival. Las incursiones se daban, pero un bien tomado Affonso se vio impedido de mostrar claridad en el área.

Sin mucha profundidad dominábamos el primer tiempo, hasta que un cabezazo de Quevedo tras centro de Arroé puso la ventaja para los íntimos. Nuestro goleador del año nos puso arriba y sumó más créditos para su posible salida al extranjero de la que se habla durante estos días. Después, salvo un remate del rival que Rosell sacó casi de la línea, la victoria parcial era justificada.

Kevin Quevedo marcó su octavo gol en la temporada.

Segundo tiempo:

Como era de esperarse, Melgar salió a mostrar todo el peso de sus hombres de ataque, pero encontró a un Alianza relativamente bien parado y atento a la posibilidad de contragolpear. Así tomó Affonso un balón largo para ejecutar un remate cruzado, y el rebote dejado por Cáceda fue convertido en gol por un bien ubicado Matzuda. La justicia del 2-0 podría discutirse, pero la superioridad del local en Matute era innegable.

Lamentablemente, los fantasmas volvieron y parecía venirse otro amargo empate o remontada en contra. Tras un mano a mano errado por Affonso, una rápida contra terminó con un golazo de Joel Sánchez desde fuera del área. Tres minutos después, Cartagena cometió un penal que el mismo jugador de Melgar se encargó de capitalizar. ¿Otra vez? ¿Otro empate se sumaría a los tontamente permitidos contra Municipal, UTC y Mannucci?

Allí la puso Joel Sánchez en un remate imposible para Gallese.

Bueno, esta vez sería distinto gracias a un factor clave: la frialdad de un juvenil en el momento de mayor tensión. Cuando jugábamos los descuentos y las tribunas apuraban -con razón- a los jugadores, un pase crucial marcó la diferencia para romper el empate. Fue el del ingresado José Gallardo, que al igual que Matzuda entró a encarar desde que pisó el terreno de juego. Así, tras recibir un pase en el sector derecho, el volante descargó en primera (¡como pedía la jugada!) para habilitar de forma magistral a Affonso y que éste anotase el 3-2 definitivo. Fue una habilitación tremendamente satisfactoria, una que dificilmente nos hubiésemos esperado de Arroé, 'Felucho' Rodríguez o el propio Quevedo (por poner algunos ejemplos) en una circunstancia del partido como esa. Con este gol sellamos una agónica victoria en casa.

Affonso se reencontró con el gol en un oportunísimo momento.

El mejor en Alianza fue...

José Matzuda. El volante ocupó muy bien el puesto de Manzaneda y fue una incomodidad constante para los defensas rojinegros. Encarando ganó varios tiros libres a favor. Sin limitarse a su banda, se movió por toda la volante para pedir el balón y asociarse; y finalmente, coronó su actuación con un gol. Un debut a lo grande.

Apreciaciones finales

• La victoria no debe tapar la terrible costumbre (porque ya lo es) de que nos empaten tras ir ganando relativamente cómodos. Es increíble cómo del 3-0 fallado por Affonso pasamos, en tres minutos, a que nos empatasen 2 a 2. Necesitamos reforzar urgentemente nuestra zaga, porque no mejorarán nuestros resultados hasta solucionar esta terrible falencia. 

• Mucha tranquilidad con Matzuda y Gallardo, y en general, con la idea de poner juveniles. Flores de un día se han visto por montones en Alianza y en diversos equipos, así que hay que asegurarnos de llevar bien a estos chicos para que alcancen un lugar más sólido en el primer equipo.

• ¿Necesidad o convicción? Que Víctor Reyes me perdone, pero yo no le creo cuando dice que no alineó a los dos muchachos por la urgencia de cumplir con la bolsa de minutos, sino por la simple intención de darles una oportunidad. Como sea, ha sido un feliz accidente.

• Hablando de la bolsa de minutos, lo de hoy invita a reflexionar tras todo el debate que se hizo en Twitter sobre la utilidad de esta norma en el torneo. Si me preguntan, no tengo una opinión totalmente establecida. Por un lado, estoy de acuerdo con Eddie Fleischman en que la alineación obligatoria de jugadores inexpertos resta competitividad al torneo en general, ya que todos los equipos no cuentan con juveniles interesantes. No obstante, sin la obligatoriedad de la bolsa probablemente no hubiésemos visto hoy a los dos volantes que aportaron para nuestro triunfo. En el caso particular de Alianza, ya iremos viendo cuánto nos favorece este requerimiento.

Próxima cita

Visitamos a Alianza Universidad en Huánuco. Buscaremos conseguir, tras mucho tiempo, un segundo triunfo consecutivo que nos siga dando muestras de mejora.

¡ARRIBA ALIANZA!

Fotos: Correo, Trome, El Comercio.