Triunfo de-morado

No importa que haya sido clásico amistoso, que haya sido un día húmedo y nublado; cuando un equipo es grande, él y su hinchada se hacen sentir calurosamente y arman la fiesta sea cual sea la condición. Sea de azul, sea de morado, la afición grone estará siempre apoyando al equipo. Lo vimos todos ayer en el Nacional donde Alianza Lima volvió a ganar un partido luego de más de un mes y medio imponiéndose a Universitario por dos goles a cero en una edición más del Clásico del fútbol peruano.

Alianza Lima 2 - Universitario 0

Se trataba de un clásico atípico en que no habían puntos en juego sino que tuvo como objetivo el recaudar dinero para que ambos equipos pudieran afrontar las deudas financieras que los aquejan. Asimismo, servía para mantener un ritmo de juego ante la para del torneo local debido a los partidos de Clasificatorias para el Mundial de Brasil 2014. Sea cual sea el contexto, este era un clásico y había que jugarlo con todo pues, así no hayan puntos en juego, siempre se juega el honor. Fue buena la organización del partido, ambos equipos salieron a la cancha a la vez y se cantaron las notas del Himno Nacional, momento no respetado por la barra del rival haciendo evidente que equipo del pueblo y del Perú hay uno solo.

El primer tiempo tuvo un dominio parejo por ambos equipos. Si bien Alianza llegaba a un mayor nivel de posesión de pelota, no hubo muchas llegadas de mayor peligro al arco contrario. Esta vez no se abusó de los pelotazos al área rival debido a la ausencia de Mostto, nuestro principal centrodelantero. En lugar de eso, se intentaba llegar a campo rival con series de toques rápidos (aprovechando la velocidad de nuestros jugadores) aunque algunas veces se caía en la imprecisión. Esa misma rapidez obligaba a los jugadores rivales a cometer faltas seguidamente, una de esas fue un artero pisotón de Antonio Gonzales a la altura de la rodilla de Junior Viza. Dicha falta le valió la roja al crema quien se fue de la cancha señalando el escudo de su camiseta, orgulloso, al parecer, de la -ficticia e inventada- "garra" mostrada al salir expulsado por patear al rival. Luego de la expulsión, la posesión de Alianza en mitad de campo fue mucho más notoria e influenciada, en gran parte, por el ingreso de "Cachetón" Albarracín por Gino Guerrero. Sin embargo, ya no habrían mayores ocasiones de gol en la primera etapa.

En el segundo tiempo, pese a que la U tuvo una en los primeros minutos en los pies de Ximénez y que fue bien bloqueada por Forsyth, el dominio fue mayormente blanquimorado. Ante la acometida de los jugadores grones y al tener un jugador menos, los defensas cremas en varias ocasiones no tuvieron otra opción que despejar la pelota fuera de la cancha para alejar el peligro de su arco. Aún así, las llegadas de Alianza no ocasionaban mayor peligro. Se intentó de lejos con remates de Albarracín y Bazán sin mayor fortuna. En estas condiciones, el ingreso de Jhonny Vidales fue importante para el desenlace del partido. Al minuto 79, la pelota le queda luego de un rebote, aprovecha para amagar y entrar al área y saca un remate fuerte que vence al arquero Llontop abriendo el marcador en el Nacional. Llegaba el merecido gol que se estuvo buscando toda la tarde para alegría de la gente grone en el estadio.

Pero aún quedaban más de diez minutos de partido en los que podía pasar cualquier cosa. Hubo un tiro libre cercano al área aliancista pero que no fue mayor peligro al cobrarlo. En la jugada siguiente llegaría el penal a favor de Alianza tras falta de Galliquio en el área. Se para Junior Ponce frente a la pelota y remata bien colocado, liquidando el partido.

Con ese resultado, el de ayer fue el primer clásico en 5 años cuyo marcador termina por diferencia mayor a un gol (el último fue la victoria grone 3-1 en Chimbote en 2007). Si bien era un amistoso, siempre alegran estas victorias de la blanquiazul frente al "clásico" rival y sirven para corregir errores de cara al torneo local. Queda pensar en el torneo local, este sábado enfrentamos a otro rival de camiseta desteñida, el León de Huánuco, a la 1:30 pm en Matute. Estamos todos invitados a seguir armando la fiesta de siempre y a apoyar al equipo para librarnos, de una vez por todas, del peligro del descenso.

¡Arriba Alianza Lima!