Este lunes que acaba de pasar, el Club nos hacía recordar a través de Alianza Play, el camino recorrido sobre el logro de nuestra corona # 25, hace un año nos despertábamos siendo campeones nacionales, hace un año el pueblo tenía su revancha después de lo sucedido…lo que en el 2020 dolía, el 2021 lo aliviaba.
Era de esperar que mientras nosotros celebrábamos el aniversario del renacimiento de Alianza, otros celebraran “descensos” con su diminuto estilo, confirmando su verdadera esencia: ser un equipo sin identidad que para sentirse “superior” y camuflar su sentimiento de inferioridad, tiene que recurrir a creerse nuestros verdugos, mientras siguen autoengañándose con la llegada de “la 27”, cuando en realidad sienten de cerca la amenaza de seguir acumulando años de sequía.
La razón por la cual será la única vez en la que reaccionemos a lo que hacen los del frente en referencia al “descenso”, y la misma por la cual ponemos la palabra “descenso” entre comillas, es porque el hincha aliancista debe tener en claro que, por más que otros intenten golpearnos con su “yo te vi descender” o “Alianza Mesa”: Alianza no descendió el 2020, Alianza no dejó de estar en primera. Para que esto hubiese sucedido completamente, tendrían que haber ocurrido dos factores en la ecuación, pues dentro de toda gestión deportiva el rendimiento futbolístico y lo administrativo son inseparables. Alianza Lima sufrió una campaña deportiva desastrosa, pero siempre cumplió con sus obligaciones administrativas; por eso la batalla legal liderada por Julio García fue toda una proeza. Nunca olvidaremos la vigilia que hicimos entre los miembros de “El Blog Íntimo” y turnándonos para conocer la tan esperada noticia del ente internacional. El campeonato 2021 empezaba aquí y la justicia cantaba victoria.
El Tribunal de Licencias de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) actuó negligentemente y por lo tanto el 28/11/2020 no debió tener ese desenlace aún con la derrota ante Sport Huancayo. Para ponerlo en corto, si la FPF aplicaba la objetividad y no participaba como juez y parte en defensa del otro club en cuestión; hubiera podido actuar de manera proactiva según las bases del reglamento haciendo efectiva la resta de puntos a Carlos Stein y no aplicar solo una sanción económica por la falta de pago a sus trabajadores de manera oportuna. Alianza Lima siempre ha respetado las normas y sabíamos que teníamos la verdad de nuestro lado, y como nosotros no vamos por debajo de la mesa o nos arrodillamos para pedir favores, recurrimos al TAS y el resto de la historia ya es conocida. Si vamos a responder los manotazos de ahogado de las gallinas, que sea reforzando estos conceptos.
Hasta ahora, lo ocurrido en el 2020 para muchos fue algo que no se entendía o se evitaba tocar, parecíamos estar en un estado de negación y alucinación. Sí, deportivamente fue el peor año de la historia, no se tiene que olvidar, ni ahora con el bicampeonato, ni nunca. De esto debemos estar conscientes todos los hinchas aliancistas. No hay que olvidar el mal manejo de la administración temporal, a los mercenarios que no estuvieron a la altura de Alianza Lima y a quienes escondieron el escudo luego de terminado el partido. Pero no hay que olvidarlo para revivir el escarnio inútil de algunos, pues el bicampeonato de ahora es esa muestra de recuperación que solo un grande como Alianza podría tener, sino para que esto nunca más vuelva a suceder.
Por todo esto es que el grito de alivio en el pitazo final del 28/11/21 fue ensordecedor y para los miembros de “El Blog Íntimo” es el campeonato más valioso de este milenio desde que el Equipo del Pueblo logró consagrarse campeón en 2001, año de su centenario. Campeonábamos en la misma fecha que perdimos el partido ante Sport Huancayo, superamos todo tipo de obstáculo que se nos presentaron, porque lo sucedido en el 2020 hacía que pudiéramos volver a contar con el ‘Zorrito’, porque pudimos conocer a una figura vital para Alianza como lo fue Barcos, por ese bloque defensivo que fue nuestra fortaleza del 2021, porque si bien era un equipo conformado para segunda división, nuestros jugadores eran de primera y lo logramos sin pretemporada. Pero sobre todo por toda su gente incondicional que hizo de todo para estar en esas dos finales, por la memoria de toda la gente que se durmió con la esperanza de ver a su Alianza campeón luego de una pandemia que llegó en el peor momento. No por nada cuando vean el documental de Alianza Play que mencionamos al inicio, escucharán al capitán decir “el hincha aliancista es lo mejor que le puede pasar al jugador de Alianza Lima”.
Todo se fue dando y confabulando para que pudiéramos soltar ese grito de campeón. Gracias a todo el equipo, al comando técnico, a la hinchada, gracias al bendito momento en que nació nuestro Alianza Lima y al momento del cual nos hicimos sus hinchas. También gracias a la familia que formamos gracias a ello: “El Blog Íntimo”. ¡Feliz aniversario de la corona 25, corona que sin sospecharlo, llegaba para que este año podamos decir “Y ya lo ven, y ya lo ven…los más campeones otra vez!
¡Arriba Alianza, toda la vida!
Directiva EBI
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