Ganar como sea | Carlos Stein 1 - Alianza Lima 2

No creo en el "ganar como sea" como filosofía de juego. Prometo extender esto en algún artículo posterior. Pero sí creo que a veces simplemente "hay que hacerlo". Alianza Lima se encuentra en una instancia decisiva de cara a sus aspiraciones. Viene de empatar, perder y empatar, cediendo paso frente a sus rivales directos, que no paran de sumar. Viene de cesar al DT con el que venía trabajando. Y todo esto bajo la acostumbrada presión que solo el club más grande del país puede sentir. El equipo no juega bien, el rival se juega la permanencia. Con técnico interino. Dos ausencias importantes. Era ganar o morir. Ellos o nosotros. En ese tipo de instancias, las exigencias futbolísticas, al menos para quien redacta, pasan a ser las más básicas. Porque, aún admitiendo que el equipo puede jugar mal ese partido, existe la posibilidad de mejorar para el siguiente. Y, como se dice, siempre se trabaja mejor con la tranquilidad de haber obtenido los resultados. 

Alianza Lima derrotó a Carlos Stein en el estadio Víctor Montoya Segura de Jaén. Así los vi.

Escribe: Rubén Ravelo

Foto: Club Alianza Lima.

 

Alianza Lima alineó con Campos en el arco; Ramos y Vílchez en la zaga central; Lagos como lateral izquierdo y Rojas como lateral derecho (ante la ausencia de Peruzzi); Concha y Fuentes (ante la ausencia de Ballón) en la volante de primera línea; Benavente y Lavandeira como volantes interiores, Arley R. como extremo y Barcos de centrodelantero.

Primer tiempo

No hay mucho que comentar sobre la primera mitad, salvo que el partido se desarrolló tal y como uno podía esperar: friccionado, con pocas ideas ofensivas, pocas opciones de gol, y por supuesto muy poco fútbol (mención especial a la cancha y su pésimo estado. ¿Así tienes a tu club, Lozano?). Aun así, Alianza, como debe ser, se sintió protagonista y trató de ejercer dominio por lo menos territorial. Recién a la mitad del periodo ambos equipos empezaron a soltar sus laterales, tomando mayores riesgos. 

Pegó primero Alianza: buena contra iniciada por Barcos. Rojas ganando la raya y logrando sacar un buen centro de zurda (sí, de zurda, su pierna menos hábil), y el propio 'Pirata' anotaría para alegría del pueblo blanquiazul (27'). Conceptual y visualmente un golazo, y parecía que se había logrado lo más importante en un cotejo tan parejo. Poco después hubo otra clara que ni Benavente ni Lavandeira (desaparecidos desde hace varias fechas) pudieron resolver. 

Stein, por su parte, reaccionaría relativamente rápido, y en una acción personal de Ísmodes en la que todo el medio campo aliancista solo se dedicó a mirarlo, se iniciaría la jugada del empate. ¿El que metió el gol? Nada menos que Gabriel Leyes (36'). El de los goles del título de 2017 e ídolo de varios tuiteros, según me comentan. Sin mucho más que contar, ambos cuadros se fueron al descanso.

Segundo tiempo

Para el complemento, las cosas no variaron demasiado, a excepción de que físicamente se empezaba, de a pocos, a notar más el desgaste en Stein que en el Equipo del Pueblo, lo que dice mucho de la buena preparación de los íntimos. En lo futbolístico, eso sí, poco se hizo.

Se intentó ganar peso ofensivo con el ingreso de Aldaír Rodríguez por un intrascendente 'Chaval', y el medio con los ingresos de Valenzuela por Fuentes y posteriormente Cornejo por Concha. Casi en la recta final del encuentro, Mora tomó el lugar de Arley Rodríguez, también de pobre participación. Se había quedado Lavandeira, que, como dije, andaba desaparecido desde hacía varias fechas. Pero en un plus de confianza, el uruguayo logró ganarle la posición a Óscar Vílchez cerca del borde del área, iniciando así su incursión en zona de peligro. Ya dentro del área, 'Lava' siente un leve contacto y se deja caer. El árbitro pita pena máxima. 'Neka' niega apasionadamente la falta mientras los demás jugadores del Stein se le van encima al juez. 

Sobre si fue penal o no, lo dejaré para las apreciaciones finales (más abajito, joven). Entre reclamos y juegos de boquilla expulsaron a Cotrina y luego a Valenzuela (que habría dirigido insultos hacia un recogebolas que quería distraer a Barcos, según trascendió). Así, ambos equipos quedaban con diez hombres. 

A pesar de todo el caliente preámbulo, Barcos no tuvo mayor problema para ejecutar y convertir en gol. El tiempo regular ya había terminado, pero se jugaron ocho minutos más en los que, felizmente para nosotros, no hubo demasiados peligros para la portería de Campos. Pitazo final. Ganó Alianza, que, contra todo pronóstico, sigue en la pelea, mientras que la otra mitad del Perú se quiere patear los huevos, como habría dicho un tal Luis Aguiar.

La figura fue:

Foto: Club Alianza Lima.

 

Hizo los dos goles y los pocos ataques de Alianza derivaron de su inteligencia. Cuando la cuota de gol de Lavandeira y Benavente desapareció en medio de la marea, la capacidad y jerarquía del 'Pirata' salieron a flote. Figura indiscutible.

Apreciaciones finales

¿Fue o no penal? Confieso que empecé esta parte pensando que no fue, pero acabo de ver las repeticiones de la jugada y veo que sí hay un contacto deliberado del pie izquierdo de Vílchez con el pie derecho de Lavandeira. Si era para que Lavandeira caiga así es otra discusión, pero el contacto, me parece, existe, y, sobre todo, Vílchez no llega a tocar el balón, lo que le da mayor credibilidad al penal. Pero vamos, desglosemos esto (todas las capturas fueron tomadas desde el canal oficial de YouTube de Willax):

El árbitro pitó penal con mucha seguridad porque desde su ángulo lo fue:

 

Como puede verse en la imagen, el árbitro tenía una perspectiva frontal. Es decir, su foto final es la de un jugador tratando de cubrir a otro a velocidad, el freno y luego las piernas de Vílchez yendo hacia un lado y las piernas de Lavandeira hacia el otro, mientras que el infraccionado trata de girar con el balón para finalmente caer. 

Hay una repetición que 'zoomea' este primer ángulo (el de la transmisión) y nos puede dar mejor idea de lo que vio el árbitro:

Finalmente, vamos al ángulo con el que todo el periodismo deportivo nacional "se convenció" de que no hay penal:

Para mí el contacto existe. Vílchez busca puntearle el balón y le da al pie. Por supuesto, no fue un golpe tan fuerte como para arrancarle la pierna a nadie y, como dije, no sé si era como para que Lavandeira caiga de esa forma, pero sí es cobrable como falta, sobre todo desde el ángulo de donde el árbitro miraba la jugada.

Por otro lado, lo que acusan los jugadores de Stein es que el juez de línea le habría dicho al principal que no fue penal, y que este le habría respondido "¡aquí mando yo!" (Misio, ¿eres tú?). A esto, cabe recordar que, aunque joda, esa es la verdad: el juez principal es el que toma la decisión final sobre cualquier jugada, aun si la decisión va en contra de las indicaciones de sus jueces asistentes. ¿Recuerdan el escándalo contra la 'U' de Chile en 2010? Bueno, pasó algo similar. El línea marcó offside, pero al final Carlos Vera lo desestimó y validó el gol. Si fue gol legítimo o no, es otra discusión, pero de que el árbitro central tiene esa facultad, es indiscutible. 

Pd. Carlos Vera, ctm.

Ahora, más allá de todo esto, llama mucho la atención cómo la prensa parece cantar en coro la misma canción cada vez que Alianza protagoniza un penal dudoso A FAVOR. Porque, claro, cuando se trata de los penales EN CONTRA que no nos vienen cobrando desde hace años, la canción se apaga automáticamente y se habla de otra cosa. Pero bueno, hay que vender, ¿no? Y qué mejor que hacerlo con el equipo que le causa arcadas a los dueños de los medios de comunicación cuando lucha por cosas importantes. ¡Hasta le hacen seguimiento a los árbitros cuando abandonan el estadio!, ¡ja! ¿cuándo se ha visto eso?

Una prueba más de que la grandeza de Alianza nace y reside en su gente, y que es su gente la que tiene que seguir remando contra todo para seguir en lo más alto. Su gente, nosotros y nadie más.

Próxima fecha

En un choque de descarte (al menos para nosotros, claro), Alianza Lima recibirá a FBC Melgar en Matute, este miércoles 21 a las 19.30. A ganar, muchachos, como sea. ¡Allá nos vemos!

¡ARRIBA ALIANZA!