Affonso hay sitio

Alianza Lima 2 - 1 Universitario

Se pasaron la semana “calentando” el clásico con esa soberbia innata que poseen: “Denis es un 9 de aquellos, es algo así como Paolo Guerrero, pero con más categoría”, “Que se cuiden los cagones, porque cuando Quintero está enchufado, tiene un juego parecido al de Mbappé”, “Yo creo que si Zubzuck tapa de todo en el clásico, ya debería tener una oportunidad en la selección porque Gallese no está en buen nivel”... Estos y muchos mensajes, igual o más surrealistas, eran fáciles de encontrar en redes sociales previo al clásico. Pero lamentablemente para ellos, otra vez se fueron con el rabo entre las piernas y, tal como diría el buen Tito Nieves: ahora viven en un mundo de mentiras, fabricando fantasías para no llorar.

Pero bueno, dejemos de hablar un poco de ellos y su mitomanía consuetudinaria para concentrarnos en Alianza y su grandeza. Es que –seamos sinceros– no es fácil voltear un marcador en un clásico y peor aún si el gol lo recibes apenas iniciado el partido, pero justamente por eso, estos triunfos se disfrutan tanto y son una delicia escribir sobre ellos, porque te motivan y te ponen tan creativo que hasta debes tomar la difícil decisión de como titular la crónica: “CREMA VOLTEADA” fue lo primero que vino a la mente, “UNA EMOCIÓN PRECOZ” fue la siguiente propuesta, basada en el gol que recibimos al inicio y la emoción que generó en los “LoloLovers”, pero sobre todo enfocada en que es muy temprano para ilusionarnos con el Bi, habiendo varios partidos por resolver primero. Al final la decisión del título de esta crónica, pasó por lo siguiente: Mientras por un lado Alianza pelea por el campeonato, con humildad y guiados por un Bengoechea que, al margen de gustos futbolísticos, ha demostrado ser emocionalmente un maestro; y con un Affonso de perfil bajo pero determinante, por el otro lado, tenemos a los bocones que han vivido todo el campeonato al fondo de la tabla, con hinchas, jugadores y técnico llorando y excusándose por la derrota pese a haber sido ayudados por cuarta vez en su historia para no descender.

Una paternidad así de grande. Foto: Depor

Escribe: El Patrón Blanquiazul

Así alinearon:

Fuente: Soccerway.com

Primer tiempo:

Entramos dormidos y nos madrugaron, habían pasado 13 segundos del inicio y la visita golpeó a través de Quintero luego de una buena triangulación que agarró a nuestra defensa recién acomodándose en el campo y a los hinchas recién acomodándose en sus asientos. Todo parecía derrumbarse desde el minuto uno y, a pesar del aliento incesante de las tribunas, el equipo no podía asumir el control del juego.

Imprecisiones, ansiedad, apuro, todo esto mostró Alianza los primeros 45 minutos en los que Maximiliano Lemos tuvo un partido más que discreto, perdiendo muchos balones y quitándole verticalidad al juego. Otro punto bajo –pero que levantó notablemente en la segunda mitad– fue Hansell Riojas, quien llegaba tarde a los cierres y sufrió para detener a Siucho. Y así, en medio de ese desconcierto terminó la primera parte y tocaba el replanteo para tratar de darle vuelta a un encuentro que, hasta ahí, dejaba más dudas que esperanza.

Cuando el corazón grita, era el empate de Godoy. Fuente: Depor

Segundo tiempo:

En la complementaria, el replanteo fue evidente desde el arranque. Bengoechea hizo dos cambios antes del reinicio; ingresó Kevin Quevedo por un Garro trabajador que levantó su nivel en el transcurso del juego, pero que fue cambiado al quedar condicionado por una amonestación en el primer tiempo. El otro cambio fue el de Oscar Vílchez por Lemos. Definitivamente el ingreso de “Neka” le dio otra cara al equipo: recuperó balones, cortó avances, organizó y distribuyó asociándose muy bien con Cruzado y con “Cachito” Ramírez, poniendo la pelota al piso y asumiendo el protagonismo del encuentro.

A los 10 minutos de la segunda mitad, de un saque de esquina llega el empate por obra y gracia de Don Gonzalo Godoy, el defensa de los goles importantes, quien empalmó exacto un rebote para marcar en el arco de Zubzuck. De ahí en adelante, Alianza se adueñó del partido al extremo que en todo el segundo tiempo los cremas no tuvieron un solo disparo al arco de Butrón, ni con el ingreso de “Lolondeira”.

Líneas aparte para nuestro capitán que aún convaleciente de una infección estomacal, decidió jugar este partido a pesar de un malestar notorio en el campo. Eres grande Leao, ¡no te vayas nunca viejo querido! Alianza te va a necesitar mucho el día que decidas colgar los guantes.

Volviendo al partido, otro protagonista que se merece los aplausos de la hinchada, es el uruguayo Mauricio Affonso, quien nunca se esconde y todo lo ve arco. ¡Qué alegría tener un buen nueve después de tanto paquete que ha llegado! El buen Mauri llevó la pelota pegada al pie, superó a dos defensas rivales y con un disparo colocado, la puso lejos del portero crema. Golazo, explota el estadio, lamento en los de Ate (¿o Breña?) y un triunfo más que amplía nuestra superioridad histórica en partidos, y que también confirma la paternidad de Bengoechea sobre Universitario.

El gol del triunfo. Fuente: www.clubalianzalima.com

La figura del partido:

Por lo que significó su gol, por la lucha constante como único punta y porque confirma su buen momento, la figura es Mauricio Affonso, seguido de cerca por Oscar Vílchez.

La figura del partido. Fuente: Andina

Apreciaciones finales:

Acabada la fecha estamos terceros en el acumulado con 66 puntos. Con esto, si se concreta el título de Melgar en el clausura y quedamos finalmente como el de mejor puntaje acumulado (sin contar a Sporting Cristal y al propio Melgar), jugaremos contra los mistianos el pase a la final nacional. El bicampeonato es una posibilidad más real ahora. De nosotros depende.

¡ARRIBA ALIANZA!