Derrotados, pero no destruidos | Binacional 4 - Alianza Lima 1

Binacional 4 - Alianza Lima 1

En su visita al Guillermo Briceño de Juliaca ante un corajudo Binacional, y con un libreto conocido para estos cotejos, Alianza arrancó con la soga al cuello por la presión del rival y logró encontrarse con el paso de los minutos. Sin embargo, este primer capítulo iba a tener un final desgarrador a partir de hechos aislados que difieren de la estrategia de Pablo Bengoechea.

Los árbitros no estuvieron a la altura del VAR (y tampoco lo merecemos. Al menos ahora, no). Foto: Líbero

Escribe: Fernando Cuadros (@danubioazulado).

Alineaciones

Así los vi

El profesor mandó cinco al fondo, tres al medio y dos puntas. La impensada lesión de Riojas pasó inadvertida debido a las ansias que consume al país menos algunos, y la cruda realidad nos mostró a un Godoy para el olvido. La presencia de Ugarriza era esa inyección de optimismo que terminó siendo peor que la enfermedad: no se le abrió el arco, y cuando tuvo la ocasión, no definió con la convicción que lo llevó a fallar un penal ante el mismo rival algunas fechas atrás.

Así es el fútbol, ¿no? Rescato del delantero peruano la sobriedad para darle el pase a ‘Cachito’ Ramírez, quien habilitó a Federico Rodríguez en el gol de la ventaja. Hasta entonces, el ritmo del juego era el siguiente: ellos iban a asfixiarnos por las bandas, nosotros apelaríamos a la contra.

Gol de Alianza Lima. Foto: Perú 21.

Todo se hundió en el fango de los desaciertos arbitrales. Entre gallos y medianoche, los dueños del circo decidieron implementar el VAR. Si en competiciones de alto calibre queda demostrado que los réferis son un apéndice de este sistema digital, un accionar pulcro resultaba idílico por estas tierras: si bien Rossell incurre en una falta digna de amarilla ─aunque se ve que no va con malicia al cruce─,  también debieron expulsar a Aldair Rodríguez luego del codazo que le propinó a Cartagena, y aquí, sí, con toda la mala leche del mundo.

Binacional iguala el marcador a poco del cierre a través de un certero zapatazo de Ojeda. Con un hombre menos, los locales tuvieron más espacios y probaron de larga distancia. Era necesario ir al descanso.

Tal vez presenciamos uno de los segundos tiempos más terroríficos de los últimos años. No nos oxigenamos y el cuadro altiplánico volvió a marcar: Aubert y Rodríguez aprovecharon las falencias defensivas para voltear y ampliar el marcador.

Ugarriza, no basta. Quiero creer en ti. Foto: Depor.

Destaco la labor de Pedro Gallese, la figura del once nuestro. Desde el primer minuto hasta el final, determinante para no traernos una derrota más abultada. Así como lo he criticado férreamente por su dejadez, en este tramo final lo hizo bien y celebro su temple bajo los tres palos.

Antes de que Millán anotase de penal, Alianza perdió una clara chance de descuento. No alcanzó con los repuntes de Ramírez ni la presencia de Balboa a poco del cierre.

Apreciación final

Corren las horas, algunos llegaremos con la mierda encima al trabajo, la universidad… la desazón pasará. Un hombre de carácter podrá ser derrotado, pero jamás destruido, dijo alguna vez Ernest Hemingway. Tenemos los argumentos para ir al frente y revertir esta situación: un equipo enfocado, con el respaldo de la hinchada más popular y fiel.

Aunque el corazón nos diga que la fe sigue intacta porque al lado de Bengoechea hemos gestado victorias agónicas, debemos ser conscientes que nos topamos ante un rival que viene de perder a uno de sus baluartes y también buscará eternizar su triunfo.

Plus

Aplaudir a nuestras jugadoras que lo dejaron todo en la final regional ante Universitario. Un puñado de locos llegamos hasta el Nacional a alentar a las blanquiazules. Noté una gran mejora respecto al juego anterior, vendrán tiempos mejores.

¡Arriba Alianza Lima!

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