Así, así, al ritmo del Alianza

Sporting Cristal 1(1) - (2)1 Alianza Lima

"¿Cómo? ¿cuándo? y ¿por qué? Son demasiadas preguntas para hacerle al destino. A veces estamos finos y otras veces nada que ver pues hay que caminar antes de empezar a correr". Estrofa de la canción Las Oportunidades de Andrés Calamaro. Frase perfecta para el año aliancista. Muchas veces nos preguntaban cómo logramos llegar a estas instancias si "jugamos a nada". Hubieron partidos donde estábamos finos en la definición y otros nada que ver, donde incluso me animo a decir que regalamos puntos absurdos. La conclusión es que estamos en la final y si bien es cierto la felicidad es inocultable, es mejor ir con mesura, pues hay que jugar primero para luego celebrar o caminar antes de empezar a correr.

Corazón y huevos es lo que nos sobró dentro de la cancha y en la tribuna svr.

Escribe: Luis Ciudad ( @luisciudad3 )


Ficha técnica

Así los vi
Miércoles por la noche. Estadio Nacional. Ambas hinchadas. En esta oportunidad la tribuna sur era la indicada e idónea para el pueblo aliancista que acudió al coloso José Diaz. Algo que debo resaltar es la acústica de este escenario. Realmente era muy agradable y motivador escuchar a los cientos de hinchas blanquiazules alentar antes, durante y después del partido en las gradas con ese eco retumbante y victorioso.

Vayamos de lleno al trámite. El encuentro se tornaría muy similar al partido de ida: Sporting Cristal teniendo la posesión del balón y los nuestros defendiendo en bloque y aprovechando los contragolpes y errores del equipo "local". Esta vez Pablo Bengoechea alineaba a Ramírez y Cruzado como titulares en el medio y dejaba a Balboa como único punta. Distinto once pero misma idea.

Esa misma idea es la que hizo el calco del gol de Fuentes en Matute. Esta vez Aldair robó un balón casi en el medio campo, asistió de gran forma a Balboa que corrió, se dio una pausa esperando que llegue un compañero por el medio y como si fuese el último balón, llegó Luis Ramirez para convertir de zurda lo que sería su primer tanto en el año. ¡Y qué tanto!

Silencio total en occidente, oriente y norte (como casi todo el cotejo). Este gol le daba mucha tranquilidad a Alianza pues se ponía 2 - 0 en el global. Sin embargo el conjunto bajopontino fiel a su estilo de juego siguió teniendo la mayor posesión del esférico, pero solo llegaba a 3/4 de cancha, el pase final y sobre todo la definición brillaba por su ausencia.

Los puntos altos en el bloque defensivo de los íntimos fueron Fuentes, Riojas y Beltrán. Realmente sí marcaron la diferencia. Incluso el mismo Balboa que ya nos acostumbró a verlo disputar balones en el medio pivoteando y ganando. Como dice "el libro del fútbol": La primera defensa es el ataque y eso lo sabe el buen "Rocky".

Terminó el primer tiempo y era lo mejor que le podía pasar a Alianza pues Cristal si bien es cierto no era contundente, sí generaba la sensación de peligro.

La prórroga no cambiaría en lo absoluto. Celestes atacando hasta tres cuartos de cancha y blanquiazules bien parados y sobre todo atentos a los cierres y despejes. Se hacían constantes los tiros de esquina y llegadas de balón parado. Precisamente es así como llegó el gol del empate. Una ejecución "buscapiernas" logró su cometido y Carlos Beltrán en su intención de despejar la metió a propio arco. Por fin los "locales" despertaban del letargo.

El empate aún clasificaba a Alianza a la final, pero ahora solo había un gol de diferencia que separaba el pitazo final de los penales. Los victorianos también tendrían lo suyo; Quevedo tuvo dos mano a mano con Patricio Alvarez pero no pudo salir airoso de estos embistes. Y es que insisto: A veces estamos finos y otras veces nada que ver.

Llegaron los descuentos y el final del partido. La hinchada más grande de todas gritaba a todo pulmón. El plantel aliancista celebraba con ellos y agradecía que los acompañaran. ESTÁBAMOS EN LA FINAL Y LO SABÍAMOS.

Próximo encuentro
El domingo nos espera la primera final ante Deportivo Binacional en Juliaca, plaza muy complicada, pero que ya conocemos. Hemos visitado dicho escenario en dos oportunidades. La primera vez por Copa Bicentenario donde perdimos por goleada. El segundo hace unas fechas donde empatamos sin goles y donde erramos dos penales. Se viene la tercera oportunidad... ¿será la vencida?

¡Hasta siempre, Pioxi!
No pienso despedirme sin antes hacer una mención especial a Juan Pablo Vergara, futbolista peruano que militaba en Binacional y que esta semana dejó de estar entre nosotros físicamente. Un abrazo de gol y gloria.


¡Arriba Alianza!