Alianza Lima sumó su tercera derrota del mes. Un punto de los
últimos doce en disputa es síntoma de un mal engendrado en la administración de
la institución, reflejado en la perplejidad de Bengoechea y el fastidio del
hincha.
A estas alturas, la única tradición que se respeta en el
club es la del culto al Señor de los Milagros. Fallamos tanto en lo colectivo
como en lo individual. Sin rumbo, sin el aliento de la popular y sin corazón,
nos alejamos de los primeros lugares del Clausura y caemos al quinto puesto del
Acumulado con 57 unidades.
Leao, Cruzado y Godoy reclamando por el tiro libre dentro del área.
Foto: Pedro Monteverde, De Chalaca.
|
Alineaciones
Fuente: Soccerway |
Primer tiempo
Actuación deplorable. El once que saltó al gramado de Matute
no fue ni la sombra del que jugó ante Sport Boys: nunca supimos qué hacer con
el balón (y sin él). Melgar nos superó en todos los sectores y no tardó en
abrir el marcador, con un remate desde fuera del área por parte de Christofer
Gonzáles a los 15’.
Los intentos para llegar al arco de Penny se limitaban a
tirarle pelotazos a Affonso y que Hohberg o Adrianzén (quizá en el peor partido
de su carrera) ganaran el rebote. Inútil labor repetida hasta el hartazgo en la
primera mitad y que caracteriza a este Alianza. Por su parte, la visita
mantenía sólidas sus líneas y se paseaba por las bandas. Irnos al descanso con
un gol abajo fue el milagro de octubre que tanto pedimos.
Zapatazo inatajable para Leao Butrón. Foto: La Repúbica. |
Segundo tiempo
Óscar Vílchez y Gonzalo Sánchez cambiaron el semblante del
elenco victoriano. Mejoramos en ataque y producto de las incursiones en el área
rival, llegó la oportunidad de igualar el cotejo: el árbitro Augusto Menendez
cobró penal a favor de Alianza tras una falta a Fuentes.
Duró poco la alegría. Penny adivinó el débil remate de
Rinaldo Cruzado y decaímos en lo anímico. Bengoechea mandó a Villamarín para
penetrar por los costados pero nunca más nos acercamos al gol.
La visita neutralizó la mitad del campo y casi liquida con
un cabezazo al poste por parte de Gino Guerrero. Los últimos minutos del
encuentro fueron friccionados y el equipo sucumbió ante el descontento de la
hinchada.
Fuentes y Garro disputando el balón. Ser empeñoso no es suficiente.
Foto: Peru21.
|
Apreciaciones finales
Intrascendente el papel de Adrianzén. Mal en el uno contra
uno y no aportó en la recuperación. No termina de convencer su contratación.
‘’Quedamos lejos, no
hay duda. Siempre me enseñaron que hay que dejar todo hasta el final del
campeonato. Toca estar triste, estar mal, pero hay que afrontarlo’’, señaló
Pablo Bengoechea tras la derrota. Más de lo mismo en sus palabras, y lo peor de
todo, sin relación alguna a lo mostrado en la cancha.
Se sintieron las ausencias de Riojas, Lemos y Quevedo. Este
último, manteniendo una conducta inapropiada que opaca lo que pueda hacer con
la pelota. Resulta extraño que Lemos, a estas alturas del torneo, sea el
jugador más regular.
Los referentes tampoco estuvieron a la altura. Leao se equivocó al tomar un balón cedido por Godoy, lo que le brindó a Melgar la
oportunidad de ampliar su ventaja con un tiro libre dentro del área. Mientras
que Rinaldo Cruzado estuvo impreciso en la distribución, volvió a fallar un
penal y estuvo flojo en la marca.
Próxima cita
Visitaremos a UTC el miércoles 24. Cajamarca siempre ha sido
una plaza difícil, y lo será más en esta situación crítica. Con el retorno de
los suspendidos, esperamos desde esta tribuna que el equipo vuelva al triunfo y se apacigüen las aguas para afrontar lo que resta del Torneo.
¡A LA VICTORIA VOLVEREMOS!
Sin Sur... y sin norte
Reviewed by Blog Íntimo
on
octubre 22, 2018
Rating:
No hay comentarios:
Sin importar el color de tu camiseta, eres libre de opinar en este espacio, siempre y cuando demuestres educación y respeto. Saludos.
El equipo de El Blog Íntimo.