"¡ALIANZA CAMPEÓN!": un grito centenario (1918-2018)

Escribe: David Amez (Twitter: @damez93)

Domingo 3 de diciembre de 2017. Cuando bordean las 4:45 de la tarde, el cabezazo de Gabriel Leyes estrella el balón contra el suelo y vence al arquero rival Éxar Rosales. Un grito de desahogo es desatado por las más de 30 mil gargantas presentes; en mi caso, es tan fuerte que me aturde. Veo en blanco tras la gran descarga de energía y todo se desvanece por unos segundos. Después, cuando recobro la noción del aquí y el ahora, lágrimas corren por mis mejillas mientras Don Cornelio, El Gran Perico, El Patrón Blanquiazul, El Poeta de la Zurda, Quintín, y más amigos y desconocidos que también se hallaban en Svr, me abrazan con la misma expresión en sus rostros. Ya estaba. Minutos después llegarían el segundo gol y la celebración definitiva: tras once largos años, CAMPEONES.

¿Por qué recuerdo todo esto ahora y con tanta claridad? Bueno, podría decirse que existen fechas tremendamente poderosas, con un significado tan inmedible, y a la vez tan trascendente, que pueden dejarnos profundamente reflexivos y emocionados, sobre todo cuando hacen alusión a algo de enorme magnitud. Fechas que pueden hacernos sonreír al apreciar lo actual en relación con lo pasado, por cuánto se ha engrandecido ese algo con el transcurso de los años y las décadas...

Fechas como la resaltada por la tan, pero tan significativa efeméride de hoy. Porque un 10 de noviembre, pero del año 1918, bajo el nombre inicial de Sport Alianza, el equipo del pueblo se alzó con el primer título de toda su historia. De ese acontecimiento, hermanos y hermanas, han transcurrido ya 100 largos años, y vaya que vale la pena contar todo lo que hubo detrás de aquella primera conquista, para luego apreciarla, reconocerla y comprender su relevancia desde nuestra perspectiva actual. Acompáñenme, pues, en esta conmemoración.

Sport Alianza, flamante campeón de 1918.
Labrando un camino

El Sport Alianza (nombre inicial de Alianza Lima) se había formado en 1901 en el jirón Cotabambas, -una calle ubicada dentro de lo que hoy es el Centro de Lima- por un humilde grupo de amigos del barrio, casi todos en edad adolescente. Estos tenían un único e ingenuo objetivo inicial: formar un equipo de fútbol como el de los “gringos” del Lima Cricket o los del Unión Cricket, que les permitiera jugar y competir en este apasionante deporte que se iba popularizando en nuestra ciudad capital.

La foto más antigua que se tiene de Sport Alianza, viéndose en ella a muchos de los niños que fundaron el equipo.

Entrenando en la calle, y posteriormente en un potrero, los aliancistas se enfrentaron en los siguientes años -en partidos amistosos- a clubes pertenecientes a las élites limeñas, a comunidades inglesas, y a otros surgidos de colegios, empresas, u otros tipos de organizaciones. Casi todos estos rivales contaban con mejores instalaciones y condiciones bajo las cuales entrenar. Sin embargo, ello no amilanó a los blanquiazules, que poco a poco fueron sumando resultados auspiciosos que les hicieron ganarse un nombre. Esto les valdría, también, el que Sport Alianza fuera incluido en 1912 como uno de los equipos fundadores de la primera división peruana, siendo nada menos que el único de origen netamente barrial

El transcurrir de los primeros torneos oficiales había mostrado un progreso bastante firme para los blanquiazules. En la temporada inaugural de 1912, el Sport Alianza ocupó el quinto lugar; en 1913 quedó tercero y al año siguiente estuvo muy cerca del título, siendo subcampeón. Volvería a ser tercero en 1915 y 1916; luego, en 1917 los blanquiazules quedaron otra vez a un paso de la gloria con un nuevo subcampeonato.

1918: ¡Alianza campeón!

Si algo caracterizó a Alianza desde su concepción, más que la quimba, que La Victoria y que su sangre afroperuana, eso fue el auténtico espíritu integrador que luego sabría mantener hasta nuestros días. Con jugadores procedentes no solo de diversos equipos, sino también de distintas realidades socioeconómicas -lo que era una apertura muy poco usual en aquellos años-, Alianza comenzó el camino hacia su primera corona.

Para 1918, varios de los muchachos que fundaron el club alcanzaron la veteranía, por lo que se hacía necesario aplicar el primer recambio generacional en toda la historia del equipo. Esto fue entendido por los aliancistas, quienes comenzaron a buscar nuevos refuerzos. Así llegaría el jugador clave para el primer campeonato: Guillermo Rivero, quien se erigió como el goleador del torneo con 18 tantos. Del mismo modo se sumaron Víctor Oyague, Ángel Noé, José Jaime, Juan Salazar y José Montellanos. La renovación se completaría con un joven Jorge Koochoi Sarmiento.

Posteriormente, en el tramo final de una extraordinaria campaña, cuando el equipo blanquiazul venía consiguiendo 18 victorias, 3 empates y solo 3 derrotas, llegó aquel partido decisivo contra Alianza Association por la penúltima fecha. Así, hace exactamente un siglo, en una tarde de domingo como la de los dos goles de Leyes, se vio consagrado el sueño de los pequeños del jirón Cotabambas. Fue también mediante un 2-0 a favor, pero con tantos marcados por los -a la postre, ídolos- Guillermo Rivero y Jorge Koochoi Sarmiento. Ellos consolidaron la primera de las 24 coronas que Alianza ostenta hasta el día de hoy.

100 años de campeones

¿Y qué nos deja este bendito centenario de nuestro primer título? A mí, por lo menos, me queda una sentida reflexión sobre cuántas cosas pueden cambiar en un siglo; pero sobre todo, una enorme satisfacción sobre cómo algunas otras, unas pocas, pueden mantenerse y maximizarse a lo largo del tiempo, debido a una innegable impregnación en la historia.

¿Se habrán imaginado los fundadores, junto a los demás artífices de aquel título de 1918, la inexplicable pasión que hoy embarga a millones por la misma camiseta que ellos vistieron? ¿Habrán podido concebir cómo, cien años después, siguen existiendo expectativas por ver campeón a aquel club creado por humildes niños del barrio de Cotabambas?

Matute ardiendo en la tradicional 'Noche Blanquiazul' de todos los veranos. Acaso un recibimiento inimaginable para los campeones del '18.

Estoy seguro de que no, de que habría sido impensable para ellos, y creo que nadie podría culparlos por no tener idea de lo que vendría después. ¿Quién se imaginaría en ese momento el legado que se estaba forjando, y cómo este se seguiría alimentando y engrandeciendo por las nuevas generaciones de futbolistas y de hinchas? Era imposible avizorar una tradición de buen fútbol reconocida por todo un país, la llegada de los Villanueva, los Benítez, los Gómez-Sánchez, los Cubillas, los Cueto o los Sáenz; el volverse la mayor cantera del fútbol nacional, o el jugar cobijados por el aliento de un aguerrido y multitudinario Comando Svr fecha tras fecha. ¿Hubieran pensado, siquiera, que conmemoraríamos los 100 años de su primer título siendo ahora los campeones vigentes? ¿Se habrían imaginado a hinchas, como ustedes y como yo, abrazados y llorando como en aquel 3 de diciembre de 2017? Nuevamente, estoy seguro de que no.

Un día que siempre recordaremos, hoy contrapuesto con otro que ya no debe tener testigos vivos.

Pero es que así se escribe la historia de los grandes. Alianza seguiría creciendo y ganándose, de forma natural, un lugar inamovible en la cultura peruana y en nuestra afición futbolera, hasta convertirse en el más querido equipo del país. Se irían construyendo, pues, una historia y tradición que sobrepasarían por mucho a sus propios autores iniciales. Una historia que no es perfecta, que incluye alegrías y tristezas, glorias y frustraciones, dicha y tragedia, pero supo mantener su inagotable pasión a lo largo de todo su curso hasta nuestros días.

¿Qué le depara a este sentimiento llamado Alianza Lima? Quién sabe. Podemos mantener nuestra grandeza, seguirla extendiendo, o retrasar ese proceso cometiendo errores. Son muchas las cosas que la historia nos pide mantener, y muchas otras las que nos exige conseguir. Pero entre todas, en el marco de este centenario del primer título, no olvidemos uno de los principales cimientos: que somos campeones. Lo somos desde antes del surgimiento de nuestros máximos ídolos y de la existencia de nuestros clásicos rivales. Lo somos desde antes de nuestro estadio, de los rodillos negros, de la tragedia, de los otros 23 títulos consagrados y de los que quedaron frustrados, de la goleada a un campeón de América y de los mundiales jugados con nuestros futbolistas. Somos campeones, y la historia nos exige luchar por seguirlo siendo siempre.

¡Vamos por más!

¡ARRIBA ALIANZA, POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS!

Fuentes: Libro de Oro del Club Alianza Lima, Libro de Historia y Leyenda del Club Alianza Lima.
"¡ALIANZA CAMPEÓN!": un grito centenario (1918-2018) "¡ALIANZA CAMPEÓN!": un grito centenario (1918-2018) Reviewed by Blog Íntimo on noviembre 10, 2018 Rating: 5

3 comentarios:

  1. Excelente articulo,Arriba Alianza para toda la vida!!!

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  2. Estoy orgullo de ser aliancista. Que buena historia de mi alianza

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  3. Grande Alianza Lima el club mas grande y rica historia del futbol peruano

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